Deja de reproducir escenarios dolorosos en tu cabeza. Deja de someterte repetidamente al dolor emocional. Te mereces mucho más que dolor y miseria. Ábrete a la felicidad y la alegría.
Acepta todo lo bueno que se te presente. No dejes que los recuerdos de situaciones difíciles te consuman y te impidan ser feliz.
Practica la habilidad de estar en el presente. Presta atención a las imágenes, los aromas y los sonidos del momento presente. Esto evitará que los malos recuerdos invadan tu mente.
Publicado originalmente en Inglés por “Your Daily Motivation”
Adaptado al español por Andrés Bermea