domingo, 21 de octubre de 2018

Elige Amar / Choose Love

Tenemos una historia que contarte…
We have a story to tell...
(Please read this story below the Spanish version)


Elige Amar

Mi esposa Abigail estaba embarazada de nuestro quinto hijo. Ella tenía dos semanas de retraso, y los últimos dos días habíamos entrado y salido del hospital, pero aún ¡no había señales del bebé Shine! Luego, el lunes por la noche, a eso de la medianoche, justo cuando me estaba quedando dormido, las contracciones empezaron, y sabíamos que no faltaba mucho. A las 3am iba manejando el coche a toda velocidad al hospital. A las 4:30 de la mañana nació nuestro bebé.

El médico dijo ¡Felicidades es un niño! Y luego hubo un extraño silencio. El médico llevó al bebé a través de la habitación, lo dejó y volvió a ayudar a mi esposa. Seguía un extraño silencio. Algo estaba mal - pero ¿Qué? Me acerqué a nuestro recién nacido, que estaba muy moradito, pero estaba respirando y con los ojitos abiertos, alerta. Ya había dado un pequeño grito, así que ¿que podría estar mal? Todo tipo de ideas pasaron por mi cabeza en ese momento. ¿Llegamos al hospital demasiado tarde? Si es así ¿Habremos dañado a nuestro bebé?

Mientras lo veía un poco más de cerca, vi que la cabeza y los ojos estaban un poco fuera de lo común, y sospeché Síndrome de Down. Para entonces, una pediatra estaba revisando al bebé y le pregunté si ese era el caso, y ella solemnemente murmuró algo que no entendí completamente acerca de que no podía decir nada con certeza hasta que le hubieran hecho algunas pruebas.

En ese momento había miedo sin lugar a duda. ¿Qué ayuda adicional necesitará? ¿Cómo vamos a pagar por el cuidado especial? ¿Qué pensará la gente? ¿Soy  inferior? ¿Cómo lo va a tomar mi esposa? ¿Qué dirán nuestros padres? ¿Quién cuidará de él cuando sea mayor? ¿Y qué de mi mi trabajo - seré capaz de hacer los viajes que tenía intención de hacer? ¿Sería capaz de amar a este niño plenamente? ¿Sería capaz de darle a este niño lo que necesitaba y aún darle a nuestros otros hijos lo que necesitaran?

En ese momento, tomé una decisión - elegí el amor sobre el miedo.

La elección de amor no significaba que tenía todas las respuestas, y no quería decir que había resuelto todos mis problemas - de hecho, ¡yo sabía muy bien que ni siquiera conocía la mitad de los problemas todavía!

Pero decidí centrarme en el amor. Eso significaba para mí que estaba abrazando la situación, realmente decidí que no importa lo que alguien diga o sienta, yo voy a estar orgulloso de este pequeño niño, y voy a hacer mi mejor esfuerzo para hacer de esta situación  una bendición. Significaba ver este shock como una oportunidad. Afortunadamente, algunas de las posibilidades positivas de inmediato comenzaron a brillar. ¿Qué mejor oportunidad podría haber para que toda la familia se sintiera más unida, para convertirse en dadores, para amar incondicionalmente, dejar de juzgar y comenzar simplemente haciendo lo mejor que cada uno pueda?

Esta experiencia me ha transformado. El amor que elegí fue no sólo el amor a mi hijo, sino también el amor a mí mismo. Quizá por primera vez en mi vida decidí que no importa lo que piensen los demás. Decidí en un nivel más profundo, que estoy bien. Estoy haciendo lo mejor que puedo con lo que tengo, y si eso no es lo suficientemente bueno para otra persona, eso no afectará a mi bien-estar.

La decisión de centrarme en el amor sobre el miedo significa: ningún remordimiento, ninguna tristeza y ninguna decepción. ¿Retos? ¡Sí! Emoción y lágrimas - ¡Sí! Pero enfocarme en el amor marcó el comienzo de todas las nuevas posibilidades que un reto trae consigo.

Desde ese momento, el amor ha regresado de nuevo a nosotros miles de veces a través de nuestro hijo, familia, amigos, vecinos e ¡incluso extraños! Desde mi decisión, mis relaciones han alcanzado un nivel más profundo, y mi experiencia de vida ha dado un salto cualitativo.

¿Puedes ver la paradoja en todo esto? Nuestro desafío inesperado fue el catalizador de una nueva dosis de amor y aceptación y he cambiado más rápido y más profundamente desde entonces. Puedo aceptar los comentarios de la gente como una valiosa retroalimentación y no tengo necesidad de estar a la defensiva. Puedo ofrecer amor sin la preocupación de que su no aceptación me quebraría. Puedo ser yo mismo sin temor al rechazo. Puedo llevar a cabo proyectos con menos miedo al fracaso.

En mi manera de pensar, lo mejor que puedes hacer por ti mismo y por el mundo es elegir el amor sobre el miedo todos los días. Hay muchas maneras de hacer esto, pero la forma de hacerlo es irrelevante hasta que te DECIDAS HOY a tomar esa decisión una y otra vez, sin importar qué. Cuando tomas esa decisión, los caminos a tu meta, y a tu amor, se abrirán ante ti y te permitirán más y más felicidad fluir en tu experiencia de vida.

Eli Shine

Como psicólogo entrenado internacionalmente, Eli Shine ha invertido los últimos 15 años de su vida en el estudio y el servicio a “Cultivando la Felicidad”. Ha trabajado con algunos de los nombres más conocidos en el área de desarrollo personal de todo el mundo. Él ayuda a la gente a cambiar la ansiedad y la negatividad en gratitud incondicional.

Eli es un orgulloso padre de 5 hijos y un marido dedicado que vive en Israel, comprometido con el mensaje de que la felicidad se encuentra disponible en cualquier momento, incluso cuando está lejos de ser evidente. Para aprender más sobre Eli y el “Desafío de la Felicidad” visita www.onlinehappinesschallenge.com

Publicada originalmente en Internet en Insight Of The Day de Bob Proctor

Adaptación al Español:
Graciela Sepúlveda y Andrés Bermea

Here the English version…

Choose Love

My wife Abigail was pregnant with our fifth child. She was two weeks overdue and the last couple of days we’d been in and out of hospital, but still no sign of baby Shine! Then on Monday night, at about midnight, just as I was drifting off, the contractions started to come, and we knew it wouldn’t be long. By about 3am we were in the car driving (fast!) to the hospital. At 4:30am our baby was born.

The doctor said congratulations - it's a boy! And then there was an eerie silence. The doctor brought the baby across the room, put him down and went back to helping my wife. Still, an eerie silence. Something was wrong - but what? I edged closer to our newborn, he was clearly very purple, but was breathing and looked alert. He'd already given a short cry, so what could possibly be wrong? All sorts of ideas went through my head at that moment. Did we come to the hospital too late? Had we damaged our baby?

As I took a closer look, I saw that the head and eyes were slightly unusual, and I suspected Down Syndrome. By then a pediatrician was checking the baby and I asked if this was the case, and she solemnly muttered something I didn't fully understand about how they couldn’t say for sure until they had done some tests.

In that moment there was fear for sure. What extra help will he need? How will we pay for the extra care? What will people think? Am I inferior? How will my wife take it? What will our parents say? Who will look after him when he’s older? What about my work – will I be able to do the traveling I intended to do?! Would I be able to love this child fully? Would I be able to give this child what he needed and still give our other children what they needed?

In that moment, I made a decision - I chose love over fear.

Choosing love didn’t mean I had all the answers, it didn’t mean I had resolved all my issues – in fact I knew full well that I didn’t even know what half the issues were yet!

But I decided to focus on love. What that meant to me, was embracing the situation, really DECIDING that no matter what anyone else said or felt, I’m going to be proud of this little boy, and I’m going to do my best to MAKE this situation into a blessing. It meant looking at this shock as an opportunity. Fortunately, some of the positive possibilities immediately started to shine through. What better opportunity could there be for our whole family to become closer, to become givers, to love unconditionally, to stop judging and start just doing the best we can?

This experience has transformed me. The love I chose was not only love for my boy, but also love for myself. For perhaps the first time in my life I decided that it doesn’t matter what anyone else thinks. I decided on a deep level that I am OK. I am doing the best I can with what I have, and if that isn’t good enough for someone else, it won’t affect my okay-ness.

The decision to focus on love over fear meant no regret, no sadness and no disappointment. Challenges? Yes! Emotion and tears – Yes! But the focus on love ushered in all the new possibilities that a challenge brings with it.

Since that moment, the love has come back to us thousands of times from our son, family, friends, neighbors and even complete strangers! Since my decision, my relationships have reached new depths, and my experience of life has taken a quantum leap.

Can you see the paradox in this? Our unexpected challenge was the catalyst for a new dose of love and acceptance and I have changed faster and more profoundly ever since. I can accept people’s comments as valuable feedback and have no need to be defensive. I can offer love without worry that it’s non-acceptance will break me. I can be myself without fear of rejection. I can take on projects with way less fear of failure.

In my mind, the best thing you can do for yourself and the world is to choose love over fear every day. There are many ways to do this, but how to do this is irrelevant until you DECIDE TODAY to make that choice over and over again, no matter what. When you make that decision, paths to your goal, and to your love, will open up before you and you allow more and more happiness to flow into your experience of life.

Eli Shine

As an internationally trained psychologist, Eli Shine has invested the last 15 years in study and service to Cultivating Happiness. He has worked with some of the most well-known names in personal development worldwide. He helps people to shift out of anxiety and negativity and into Unconditional Gratitude.

Eli is a proud father of 5 children and a dedicated husband living in Israel, committed to the message that happiness is available any time, even when it is far from obvious. To learn more about Eli and the Happiness Challenge visit www.onlinehappinesschallenge.com

Originally published on Insight Of The Day from Bob Proctor