Happy Hearts

Compilado por Graciela Sepúlveda

Nuestras vidas están llenas de momentos que tienen poca trascendencia, aparentemente, y sólo unos pocos que dan un giro -a veces radical- a nuestra existencia. Y eso fue lo que le sucedió a la hermosa modelo Checa Petra Nemcová, quien tras sobrevivir al terrible tsunami en Tailandia en el 2004, cambió por completo su vida, les comparto su historia…

Petra Nemcová nació en Karviná, República Checa el 24 de junio de 1979. Creció en un régimen comunista sin saber qué era tener privilegios. Su madre era profesora y su padre construía casas. Apenas tenían qué comer, sólo huevos y lentejas. Cualquier ingreso era importante para llegar a fin de mes. Petra cuenta que sus padres se sacaban, literalmente, el pan de la boca para que su hermana y ella pudieran comer. Eran muy pobres, pero recibieron mucho amor. Desde que Petra empezó a ganar dinero solo tenía una idea en la cabeza: devolverles todo lo que le han dado. Adora los recuerdos de su juventud. Tuvo una infancia muy sencilla, cerca de la naturaleza. Hoy, cuando algo sale mal, cierra los ojos y vuelve en su  memoria a sentarse sobre la colina que dominaba la casa de sus abuelos. Fue allí donde, desde muy pequeña, aprendió a no pisar las flores y a respetar el medio ambiente.

El tiempo pasó, y Petra, de nariz afilada, ojos seductores y una altura de más de 1,77 metros, se convirtió en una de las modelos más cotizadas tras ser elegida como una de las preferidas por la revista Sports Illustrated para sus números especiales de trajes de baño. Petra fue descubierta por un cazatalentos mientras caminaba por las calles de Praga, su primer trabajo para esta publicación sucedió en el 2001. Un año después, volvía aparecer en otro reportaje para mostrar las últimas tendencias en trajes de baño y, en el 2003, triunfaba siendo elegida para la portada de esta misma revista, un lugar que han ocupado modelos como Heidi Klum o Beyoncé, quienes vieron impulsadas sus carreras internacionales gracias a este trabajo. Petra también comenzó a trabajar para marcas como Clarins, Lancaster, Max Factor, Bulgari y La Perla, representándolas en pasarelas, comerciales, campañas y sesiones fotográficas. Habla checo, eslovaco, polaco, italiano, inglés, y un poco de francés

Uno de esos momentos que marcan para siempre fue el que vivió esta supermodelo checa, quien enfrentó una dura experiencia durante el tsunami registrado en diciembre de 2004 en el Sudeste Asiático, donde no sólo resultó gravemente lesionada, sino que además perdió al que hasta entonces era el amor de su vida.

En esa ocasión, ella se encontraba de vacaciones en Tailandia junto a su novio, el fotógrafo británico Simon Atlee. Durante el tsunami, Petra consiguió subirse a una palmera y sobrevivir aferrada a ésta por 8 horas sufriendo un dolor insoportable que la hizo desmayarse dos veces, pues tenía la pelvis fracturada en 4 y múltiples lesiones internas, además de ser testigo de uno de los desastres naturales más devastadores de los que se tengan registro. Su pareja no tuvo la misma suerte: su cuerpo fue encontrado en marzo del año siguiente.

Petra estuvo varios meses en recuperación.

Tras pasar por esta traumática experiencia, decidió retirarse del modelaje comercial y cambiarlo por el de beneficencia. “Lo haré siempre que haya un significado y una buena causa detrás”, declaró en ese entonces.

Dicho y hecho, pues sólo unos meses después creó la fundación “Happy Hearts”, la cual reconstruye colegios en países azotados por catástrofes naturales.

La iniciativa comenzó con la construcción de escuelas y dormitorios para los niños huérfanos por el tsunami de Phuket, en Tailandia, a quienes además se les brindó apoyo psicológico. “Es muy duro ver la mirada de estos niños llena de confusión, miedo y desamparo. Deseo intentar ayudarles para superar eso, y darles estabilidad psicológica”, dijo Petra tras la creación de Happy Hearts.

Más tarde expandió la iniciativa a otras naciones como Perú, y Chile, actualmente son 9 países a los que Petra ha acudido a ayudar después de algún desastre natural, Haití (donde vive actualmente), Indonesia, Filipinas, Chile, Colombia, México, Perú, Tailandia y Estados Unidos.

"Fui bendecida para sobrevivir al tsunami en Asia, en 2004. Vi lo que pasa en la vida de los niños que pierden a sus padres, a sus hermanos, a veces hasta 11 miembros de su familia y quedan olvidados, sin nadie que los apoye. Viendo eso, no te puedes quedar sin hacer nada", compartió Petra. Por lo que actualmente el 70 por ciento de su tiempo, algunas veces hasta el 90, está destinado a la fundación “Happy Hearts” con la que ha podido reconstruir escuelas para niños, ya que en esto ella ve un gran impacto tanto en los niños, como en las familias, la comunidad y en las futuras generaciones.

Desde 2005, año en el que Happy Hearts quedó formalmente establecida, se han levantado los muros de más de 120 escuelas devastadas por algún desastre natural en alguno de los países que les comenté anteriormente, pero sobre todo, se han reconstruido las vidas de 50,000 niños a los que la naturaleza los ha dejado sin nada. "Ver la increíble necesidad, me hizo soñar en poder darles el cuidado, apoyo y oportunidades a los niños que quedan devastados en cuestión de segundos", agregó Petra.

En México por ejemplo en Huimanguillo, Tabasco, en 2011 se inauguró una escuela Happy Hearts de nombre Margarita Maza de Juárez, recordemos que Tabasco muy seguido sufre inundaciones, también otro estado beneficiado ha sido Veracruz. Por cierto, desde el 2012 Carlos Slim se asoció con Petra para la reconstrucción de escuelas en México, empezando precisamente en Veracruz.

Y con todo esto se cumple el sueño de una modelo, de cientos de niños, de decenas de familias y sobre todo, con los más altos estándares de calidad, ya que las escuelas que construyen tienen 4 pilares. El primero es que son a prueba de desastres, el segundo es que tienen laboratorios de cómputo para proveer de mejor educación y mejores oportunidades de empleo en el futuro. El tercero es que son escuelas sustentables, les dan los medios para que no dependan de nadie, pero tienen todas las facultades y el cuarto es que cuentan con programas enriquecedores, agregando preparación ante los desastres.

Así que hoy Petra Nemcová ha hecho de la tragedia una oportunidad, en la que eligió cambiar el modelaje por la filantropía. Y no solo apoya su fundación, sino a nueve fundaciones y obras de caridad más, las cuales apoyan diferentes causas como: educación, medio ambiente, salud, pobreza, esclavitud y trata de personas, desempleo, agua, etc.

Que alegría da cuando las personas que tienen fama en el mundo del espectáculo, la moda, el deporte, etc. se preocupan por los demás, y utilizan esa fama en pos de buscar una mejor vida para los más necesitados, una vida digna y feliz, con la que ellos también puedan alcanzar sus metas y el éxito. Y volvemos a ver, como en otras ocasiones, que las cosas suceden por algo y para algo, si Petra no hubiera sufrido esa terrible experiencia, quien sabe si esas 120 escuelas, y las que faltan, se hubieran reconstruido y ofrecido una educación de calidad a tantos niños. Petra nos invita a vivir cada momento significativamente, pues no sabes si el siguiente minuto vaya a llegar, y a elegir siempre enfocarnos en lo positivo de todas las situaciones que nos suceden. Ahora Petra es una persona más exitosa que nunca, pues en ese éxito la acompañan cientos de niños que gracias a ella tendrán una vida mejor.